La personalísima pintura de Hugo Aroca puede contemplarse hasta el 5 de diciembre en el Nuevo Centro Cultural.
La exposición que lleva por título ‘Paisaje Intrapersonal’ permanecerá expuesta en el vestíbulo del Nuevo Centro Cultural, en La Rambla.
Una serie de cuadros en los que lo primero que atrae son las transparencias abstractas, pero si el espectador aguarda solo un par de segundos, nota como un imán hace que entre en el cuadro por una pequeña puerta y sea imposible salir por el aire cromático que desprende cada obra.
A partir de ahí es cuando el espectador empieza a descubrir los distintos itinerarios y recorridos del paisaje y va paseando, disfrutando del viaje, descubriendo poco a poco las soluciones plásticas a los problemas de representación, aparente casualidad que sin embargo es fruto de una observación calmada, tranquila, sin tachaduras ni empastes que requieran aparatosas correcciones.
En la obra de este joven pintor la sensación de realidad pintada entra en el espectador poco a poco y al final, la experiencia de un envolvente realismo, del todo sensorial, más veraz que cualquier alarde de virtuosismo formal.
La forma de pintar de Hugo Aroca es contemporánea, se aleja para percibir y regresa para pintar. Cada cuadro de este artista es una experiencia vivida y transmitida del conocimiento activo de la naturaleza y materializada en pintura.