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Un inspector de policía nacional fuera de servicio se encontró el pasado viernes en Coslada con un atraco en una tienda de telefonía en Coslada.
Tras dar el alto a los ladrones tuvo que efectuar tres disparos al aire de forma intimidatoria para tratar de frustar el golpe. Su acción propició que uno de los cuatro ladrones, un hombre magrebí de unos 26 años, fuera detenido al intentar huir y que se recuperase parte del botín, ya que el arrestado llevaba en un saco 80 teléfonos móviles.
Los hechos se produjeron el pasado viernes sobre las 20.00 horas en la calle de Doctor Michavila, 12. Cuatro personas encapuchadas y con guantes entraron en la tienda de telefonía de Vodafone. Llevaban armas blancas con las que amenazaron a los empleados y consiguieron meter en varias bolsas un centenar de teléfonos. Les esperaba en la calle un BMW de color oscuro para darse a la fuga.
En ese momento pasó por delante de la tienda un inspector de Policía Nacional fuera de servicio destinado en la Brigada de Seguridad Ciudadana y con bastante experiencia. Al observar como los asaltantes salían a la calle intentó detenerlos. Uno de los ladrones le puso al agente una navaja en el cuello por lo que el policía efectuó hasta tres disparos al aire.
Tres de los asaltantes se subieron al BMW y huyeron. El cuarto ladrón no pudo alcanzar el todo terreno y salió corriendo tras dejar en la calle un saco con los teléfonos móviles. En ese momento un coche patrulla de la Policía Local se encontraba muy cerca, en la calle del Olmo.
Los policías locales se percataron inmediatamente de lo sucedido y salieron a la carrera detrás de ese cuarto individuo dándole alcance y deteniéndole justo a unos 180 metros en la puerta del centro de salud Doctor Tamames. El detenido, árabe y de unos 30 años, ofreció al principio mucha resistencia, pero finalmente fue reducido por el agente que le seguía.
El arrestado cuenta con bastantes antecedentes policiales y penales. A través de las diligencias de investigación que se están instruyendo en la comisaría de Coslada, el Grupo de Policía Judicial investiga la identidad de los otros tres individuos que se dieron a la fuga probablemente también de origen marroquí. El BMW en el que huyeron luego se comprobó que figuraba como robado.
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