La Policía Nacional ha resuelto ocho casos de denuncias falsas de robos con violencia o intimidación de teléfonos móviles y carteras en Coslada y San Fernando de Henares.
A todos los denunciantes se les atribuye una simulación de delito y a los que solicitaron a su seguro la indemnización por el robo de su teléfono, además, un delito de estafa, según ha informado este martes la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
Los investigadores detectaron incoherencias y contradicciones en las denuncias interpuestas por los supuestos afectados. Los agentes descubrieron que los denunciantes habían perdido los efectos, o bien se los habían sustraído al descuido en discotecas y otros locales de ocio.
Tras someter a los supuestos afectados a nuevas declaraciones, los agentes detectaron que había contradicciones en sus versiones. Finalmente, consiguieron determinar que ocho presuntos robos en las dos localidades del Corredor de Henares no eran reales.
Una vez que los agentes de la Policía Nacional ha esclarecido que estos ocho supuestos robos eran falsos, se ha hecho a todos los denunciantes responsables de un ilícito penal de simulación de delito. Además, a aquellos que en el momento de la denuncia solicitaron a su seguro contratado una indemnización por el robo de su teléfono móvil también se les ha imputado un delito de estafa.
Se entiende como denuncias falsas los supuestos en los que una persona imputa a otra hechos de infracción penal, siendo consciente de su falsedad. Las penas para este tipo de delitos varía en función de la gravedad de lo que se acuse. De esta manera, un delito grave implicaría una pena de prisión de entre 6 y 12 meses de prisión, una menos grave un multa de entre 12 y 24 meses y un delito leve una sanción de entre 3 a 6 meses.