Un tren de la red de cercanías sufrió un descarrilamiento ayer por la tarde entre las estaciones de San Fernando de Henares y Coslada, lo que ha generado daños en la infraestructura, seis heridos leves y alteraciones en varias líneas ferroviarias. El suceso se produjo alrededor de las 15:26 horas del lunes 27 de octubre de 2025.
¿Qué ocurrió?
El convoy implicado era el de la línea C‑2 (Cercanías Madrid) número 21541, que cubre el trayecto entre Guadalajara y Chamartín. Al aproximarse a la estación de San Fernando de Henares, el quinto y último vagón —de un total de cinco— se salió del eje de la vía en el cambio de aguja de entrada a la estación.
El incidente forzó el corte de tensión eléctrica en la zona a las 15:53 horas, lo que dejó sin circulación ese tramo y provocó la suspensión o reordenación del servicio en las líneas C-2, C-7 y C-8 de la red de RENFE.
Víctimas y atención sanitaria
Seis personas resultaron heridas leves. Cuatro recibieron atención en el lugar y fueron dadas de alta inmediatamente. Dos mujeres —una de 53 años y otra de unos 40— fueron trasladadas al Hospital del Henares en Coslada para evaluación.
Afortunadamente, no hubo heridos graves ni víctimas mortales.
Estado actual del servicio
Tras el descarrilamiento, el servicio ferroviario en el tramo afectado quedó interrumpido. A día de hoy, la circulación aún está condicionada. Las líneas C-2, C-7 y C-8 operan con frecuencias reducidas, y se han establecido servicios de autobús lanzadera entre estaciones intermedias para mitigar el impacto sobre los viajeros.
En concreto, entre Guadalajara y San Fernando se ha fijado una frecuencia aproximada de un tren cada 15 minutos, con paradas en todas las estaciones. Desde San Fernando hacia Chamartín, los trenes solo realizan parada en la estación de Fuente de la Mora antes de llegar a Chamartín.
Además, se han reforzado las líneas de autobús interurbanas (281 y 287) y la Línea 9 de Metro incrementó su frecuencia un 10% para absorber parte del flujo de viajeros afectados.
Causas y responsabilidades
Las causas del descarrilamiento están siendo investigadas por las autoridades ferroviarias. Aunque se descartó inicialmente el exceso de velocidad como factor, se apunta al cambio de aguja como elemento crítico del incidente.
Los medios también han señalado que el tren implicado pertenece a un modelo muy usado en la red de Cercanías desde finales de los años ochenta, lo que pone sobre la mesa el debate sobre el estado de la infraestructura ferroviaria.
Impacto y reacciones en Coslada
El suceso ha generado malestar entre los usuarios habituales del servicio, muchos de los cuales denunciaron falta de información y aglomeraciones en la estación de San Fernando de Henares esta mañana. “Una vez dentro de la estación nos estuvieron moviendo de un andén a otro sin saber qué pasaba”, declaró un pasajero.
Desde organizaciones vecinales se reclama una mayor intervención y transparencia por parte de las administraciones para garantizar la seguridad y fiabilidad del transporte público en la zona del Corredor del Henares.
¿Qué sigue ahora?
Las labores de retirado del vagón descarrilado, la reparación de la vía y la normalización del servicio están en marcha. Pero la situación no será resuelta en horas: la infraestructura ferroviaria requerirá trabajos de revisión que podrían prolongarse en los próximos días.
Mientras tanto, los usuarios deben planificar sus desplazamientos con antelación, comprobar las rutas alternativas y prever mayores tiempos de espera.
Coslada, al situarse en el corazón del Corredor del Henares, sufre de forma directa los efectos de este tipo de incidentes. Este descarrilamiento no solo interrumpe un servicio esencial, sino que recuerda la necesidad de una red ferroviaria segura, mantenida y eficiente.




