La Fiscalía provincial de Madrid ha presentado una acusación contra A. P. C., un inspector de Policía destinado en Coslada, solicitando una pena de hasta cuatro años de prisión. El inspector se enfrenta a cargos de infidelidad en la custodia de documentos y violación de secretos, tras realizar más de 1.300 consultas no autorizadas en las bases de datos policiales.
Según el escrito de acusación, A. P. C., perteneciente a la Brigada Local de Seguridad Ciudadana del Cuerpo Nacional de Policía, llevó a cabo estas consultas entre el 25 de octubre de 2019 y el 18 de diciembre de 2019. Sorprendentemente, estas consultas no estaban justificadas por razones de servicio, ya que el inspector las utilizaba con fines particulares para favorecer a amigos.
La amiga del club de alterne
Durante ese período, el acusado realizó 153 consultas a las bases policiales, entregando personalmente los resultados impresos a terceras personas fuera de la comisaría. Un ejemplo particularmente grave es el caso de una amiga dueña de un club de alterne en San Fernando de Henares, a quien A. P. C. proporcionó información confidencial sobre denuncias de violencia de género, fichas y antecedentes policiales de su expareja.
Además, se reveló que el inspector se reunió en su despacho con una amiga abogada, llevando a cabo 26 consultas en las bases de datos policiales relacionadas con datos personales de la letrada y de un abogado vinculado a la operación policial denominada ‘El Bloque’. Esta operación resultó en la acusación del comisario Ginés Jiménez Buendía, entre otros.
El juicio está programado para el miércoles en la Sección Cuarta de la Audiencia Provincial de Madrid. Estos graves cargos ponen de manifiesto la presunta utilización indebida de información confidencial por parte de un miembro de las fuerzas de seguridad y violación de secretos, lo que podría tener consecuencias significativas para el inspector y plantear preguntas sobre la integridad del sistema policial.